los temidos calambres
Se llama calambre a una contracción o espasmo que se da en los músculos de manera involuntaria. Por lo general causan dolor y molestias que pueden ser mínimas o agudas, dependiendo de la intensidad del calambre, y la duración del mismo puede variar desde segundos a largos minutos.
Los músculos afectados comúnmente son: abdomen, cuello, manos, muslo, pantorrillas y pies.
Las causas de los calambres pueden ser muchas, generalmente se da por realizar un trabajo pesado que agote al músculo, pero también puede ser provocado por cuestiones nerviosas o por carencias nutricionales.
Vitaminas y nutrientes para prevenir calambres
Complejo de Vitamina B: Esta vitamina favorece a los músculos, protegen el sistema nervioso, aumentan los niveles de energía y producen eritrocitos.
Vitamina D: Esta vitamina es la única que puede producir el organismo. Los médicos recomiendan exponerse al sol por 10 minutos, 2 o 3 veces por semana, así la piel recibirá rayos UV y el organismo lo convertirá en vitamina D.
Magnesio: Cuando una persona realiza ejercicios físicos, por medio de la sudoración pierde muchos minerales y uno de los electrolitos que más se pierden, es el magnesio.
Calcio: Otro electrolito que es importante obtener en cantidad para que la sudoración no cause desequilibrio en el organismo y calambres, es el calcio.
Potasio: Uno de los síntomas más comunes de la hipokalemia, que es como se llama al déficit de potasio, son los calambres en los músculos.
Sodio: El sodio se elimina del organismo por medio de la sudoración y la deshidratación, y esto le da lugar a los calambres. Las personas que realizan ejercicio físico que son las que más sudan, por eso necesitan mantener equilibrado sus niveles de sodio
En un estudio llevado a cabo a por el International Journal of Sports Medicine en 2009 a jugadores de fútbol se vio que estos eran propensos a sufrir calambres musculares debidos a un consumo insuficiente de sodio durante el entrenamiento.
Te damos unos consejos para tener en cuenta
- La prevención es la mejor herramienta para combatir los calambres, para ello la nutrición juega un papel fundamental.
- Mantener un adecuado nivel de hidratación antes, durante y después del ejercicio es vital para evitar los calambres musculares.
- Escucha tu cuerpo a menudo, él mejor que nadie conoce los límites de dónde pretendes llegar con tu entrenamiento.
- Los estiramientos y el trabajo de fisioterapia te pueden ayudar a la desaparición de los calambres. No olvides estirar correctamente después de cada sesión de entrenamiento que realices.